En directo desde el pesquero os escribo estas líneas para corroborar la entrada anterior. Un grupo de pescadores jóvenes, al vivo, se fueron sobre las 4,30 de la mañana, y cuando pasé por donde estaban, me encuentro tiradas por el suelo los cacharritos fluorescentes esos. Además de botellas de refrescos y agua, trozos de sedal, envoltorios de todo tipo.
Hay que decir que hay una papelera a menos de 100 metros, y que les pilla de camino al coche….
Lo trágico es que como yo lo he recogido y tirado en la papelera, cuando vuelvan y vean que está limpio, pensarán que da igual dejarlo, porque hay alguien que lo recoge…
Actualización de la mañana a las 9,00:
La luz ha dejado ver más porquería que dejaron anoche, sedal por todos lados, los envoltorios de los indicadores fluorescentes, más botellas y latas… En fin, al final llevé a la papelera dos bolsas más de porquerías de otros días y personas…
No es nada nuevo. Aquí también ocurre y me da mucha rabia. Queda tanto por hacer.
Espero que tu buena acción se vea recompensada.
Saludos
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Agradezco tus palabras, pero las cosas no se hacen por una recompensa, sino porque hay que hacerlas. Esta noche me he pasado y estaba igual…
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